Este edificio de equipamiento dotacional actúa como cabecera del acceso al barrio de Valdebernardo, en Vicálvaro. Se proyecta un conjunto de volúmenes pétreos y masivos, como si estuvieran tallados para formar una gran pieza escultórica, generando caras inclinadas, aristas vivas y componiendo interesantes secuencias de huecos de diferente profundidad en la fachada. Esta forma arquitectónica singular y compleja satisface de manera óptima las variadas exigencias relativas a aspectos urbanísticos, climáticos y medioambientales. El edificio cumple con el objetivo prioritario de ofrecer una óptima accesibilidad, superando los requisitos establecidos en las distintas normativas aplicables.